La Iglesia Ortodoxa Rusa, una joya arquitectónica de Buenos Aires
El jueves 18 de diciembre de 1898 fue el día en que se colocó la piedra fundamental para iniciar la construcción de la Iglesia Ortodoxa Rusa en Buenos Aires. Fue la primera de ese rito que se construyó en América del sur. Se cumplen 127 años.
Emplazada en la calle Brasil 315, frente al Parque Lezama, en el barrio de San Telmo, fue proyectada por el arquitecto ruso Mihail Preobrazensky y el proyecto fue adaptado por el arquitecto noruego, Alejandro Christophersen. Se inauguró el 19 de octubre de 1901, con la presencia del presidente Julio Argentino Roca. Las crónicas de época cuentan que ese día el templo estuvo engalanado con palmas y una gran orquesta aportó la banda de sonido desde la vereda. El arcipreste Izrastzoff dictó su sermón en español y el coro cantó el himno ortodoxo “Muchos años”. La satírica Caras y Caretas le tomó el pelo a Roca, porque el himno auguraba muchos años de vida y el mandatario ya transitaba sus últimos días en el poder.
El templo está construido en el Estilo Moscovita del Siglo XVII.
Desde la barranca del parque, sobre la calle Brasil, se puede observar la fachada de la Iglesia, destacándose en la parte superior, el conjunto de las cinco cúpulas acebolladas, color turquesa (una mayor central y cuatro menores), recubiertas de chapas de zinc. Sobre cada una de estas cúpulas se eleva una cruz que mira hacia el oriente, sujeta por cadenas.
La fachada presenta un gran frontón, tres ventanas con vitreaux en los que se aprecian distintas escenas bíblicas y en una de las paredes laterales, la representación de la Santísima Trinidad, realizada en mosaico veneciano, en San Petersburgo.
En su interior hay íconos y objetos traídos de Rusia.
La Iglesia Ortodoxa Rusa es Católica Apostólica Ortodoxa, es decir que son más conservadores que los romanos. El Obispo es la autoridad máxima y en el caso de esta iglesia, tiene jurisdicción en Argentina y toda América del Sur.
La misa es totalmente cantada. El sacerdote no canta, entona y en todos los oficios es así. La misa es dada en eslavo y español y el último domingo del mes, totalmente en español. La última inmigración que vino de Ucrania, obligó a tener que volver a dar la misa en eslavo.
Los fieles escuchan la misa de pie, en actitud de respeto y la mujer debe usar falda, ya que es el símbolo con el cual se identifica a la mujer. El pantalón es el símbolo del hombre.
Los ortodoxos honran y veneran las imágenes de Cristo, de la Virgen María y de los Santos, pero no las idolatran ni les sirven, ya que la adoración corresponde únicamente a la naturaleza divina. Para ellos, la madre de Dios fue concebida como cualquier ser humano y para los romanos fue concebida sin pecado. Para los ortodoxos, el único que fue concebido sin pecado fue Cristo.
Poseen los mismos Siete Sacramentos; el de la Confirmación es otorgado inmediatamente después del Bautismo. Bautismo es una palabra griega que significa emerger, por lo tanto, para emerger hay que sumergir, por ello las personas que van a ser bautizadas son sumergidas en una tina especial o tanque australiano.
Se confirma junto con el Bautismo porque la confirmación hace al bautizado miembro pleno de la Iglesia, para poder comulgar. El Bautismo es la salvación.
La confesión es obligatoria porque hay que estar limpios de pecado antes de tomar el cuerpo de Cristo que es lo más sagrado.
En la ceremonia del casamiento se corona a quienes se van a casar, en la primera parte se celebra el compromiso y en la segunda, el casamiento.
Un detalle interesante que seguramente muchos desconocen es la manera de persignarse:
"Los ortodoxos unen el dedo pulgar, índice y mayor, simbolizando la Santísima Trinidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo unidos en una sola persona y los otros dos dedos (anular y meñique) simbolizan a Cristo, Dios y hombre en la tierra".
- En el nombre del Padre (en la frente) porque Dios está en el cielo, es la cabeza, el cerebro que maneja todo.
- Del Hijo (en el estómago) porque es su Hijo que bajó a la tierra.
- Del Espíritu Santo (a la derecha y luego a la izquierda) porque fue crucificado, resucitó, al tercer día, subió a los cielos, está sentado a la diestra de Dios Padre y su Reino no tendrá fin.
- Amén en el corazón.
Fuente: Datos que nos habían sido aportados por el Obispo, padre Valentín Iwaszwicz, quien falleció el 23 de abril de 2015.
Susana Espósito - 4383 caracteres – Miércoles 17/12/25
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