OPCIONES
DEL MENU

  • Home
  • Noticias de la Ciudad
  • Historia de la Ciudad
  • Barrios Porteños
  • Edificios destacados
  • Monumentos
  • Turismo en la Ciudad
  • Poco conocido
  • Costumbres Porteñas
  • Filete Porteño
  • Antiguos oficios
  • Qué es el Tango?
  • Qué es la Milonga?
  • Cena Show
  • Contacto


  • Usted es el visitante

    Desde 01/01/2016




    ¿Vivir más o vivir menos y mejor?

    Mucho se habla acerca de la longevidad y cómo cuidarse para vivir hasta los 100 años o más, que es lo que todos queremos. Sin embargo deberíamos preguntarnos: ¿vivir más o vivir mejor?

    100 añosCuando se goza de buena salud, se ha llevado una vida sana, con buena alimentación, actividad física y eso, está acompañado de una buena situación económica que permita hacerlo, probablemente se llegue a vivir muchos años y bien, pero, en los tiempos que corren, cuando el dinero no alcanza, las jubilaciones son totalmente magras, no se tiene un techo, un plato de comida con los nutrientes necesarios, una buena atención de la salud y contención familiar ¿es posible llegar a viejo y bien?

    También se está hablando mucho de la salud mental, que por supuesto incide en la salud general y recién ahora se le está prestando más atención y dando mayor difusión a la importancia de tratar a tiempo ciertos problemas que tienen que ver con ello y afectan de manera negativa a nuestro cuerpo.

    La expectativa de vida aumentó en los últimos años y llegar a los 100 años, algo que hasta no hace mucho tiempo era considerado un objetivo bastante ambicioso, hoy no lo es tanto. Los investigadores creen que existe un “vínculo potencial” entre el metabolismo, la nutrición y la longevidad.

    Cada vez más personas llegan a esa edad y los especialistas destacan que la meta debe ser alcanzar esa edad en el mejor estado físico y mental posible. Para lograrlo, según el médico canadiense-estadounidense Peter Attia, hay que tener un plan.

    Peter Attia, autor del bestseller Outlive: The Science & Art of Longevity (Sobrevivir: la ciencia y el arte de la longevidad), experto en longevidad, aseguró que “si alguien desea vivir bien hasta los 100 años, es posible que tenga que trabajar un poco para que su última década de vida (su “década marginal”, como él la llama) sea saludable y gratificante y no lo encuentre limitado por la enfermedad”.

    La clave, para él, es “adoptar nuevas formas de considerar la salud, y hacer un mejor trabajo para hacer coincidir la duración de vida (cuánto tiempo se vive) con la duración de salud”, esto es, cuánto tiempo vivirá alguien libre de enfermedades crónicas u otros problemas de salud.

    El número mundial de centenarios se duplicó aproximadamente cada década desde 1950 y se proyecta que se quintuplicará entre 2022 y 2050.

    “Les pido a los pacientes que piensen específicamente en lo que quieren poder hacer cuando tengan 80 años o más, y que comiencen a entrenar para eso cuando tengan 40, 50 o 60 años”, explicó Attia, quien aclaró que “a medida que se envejece, la degradación de la fuerza, la resistencia, el equilibrio y la variabilidad de la parte inferior de las piernas es tan profunda que no basta con caminar dos millas (un poco más de tres kilómetros) cuando se tiene entre 40 y 50 años, y asumir que eso permitirá hacer el trabajo en la edad adulta”.

    “Lo mismo cuando se tiene 80 años. A esa edad hay que apuntar mucho más alto”. En su mirada, para poner en práctica “el Decatlón Centenario” hay que preguntarse qué se querrá hacer en la década marginal. Y cuanto más específico sea el objetivo, mejor, “porque podrá entrenarse para ello y aumentar las probabilidades de estar preparado para ello”, según el especialista.

    El ejercicio, la clave para mantenerse en forma y alcanzar la longevidad. Para Attias, aún las personas sedentarias que no realizan ninguna actividad, si empiezan desde cero, “simplemente hacer 90 minutos de ejercicio a la semana dará como resultado una reducción del 15% en la mortalidad por todas las causas, incluso las enfermedades como el cáncer, las cardiovasculares, las neurodegenerativas y las metabólica.

    De allí que para el experto “el arte de vivir más años tiene poco que ver con ir al médico, y más con desafiar y evitar simultáneamente todos los factores que contribuyen al declive físico, cognitivo y emocional”.

    Hacer ejercicio reduce el riesgo de cáncer, enfermedades cardiovasculares y enfermedades neurodegenerativas. Para este especialista, “el ejercicio, la nutrición, el sueño y la gestión de la salud emocional están asociados a una vida más larga y saludable”.

    Seguramente esto sea así, pero ¿puede aplicarse en un país en el que hay tanta inestabilidad, crisis económica, inseguridad y donde los adultos mayores que trabajaron toda su vida e hicieron los aportes correspondientes para asegurarse una vejez digna, hoy cobran una jubilación con la que no pueden solventar sus necesidades básicas? Si apenas pueden comer, no cuentan con una atención médica adecuada, no pueden pagar sus tratamientos o medicamentos y la tristeza los embarga de tal manera que poco deben pensar en hacer ejercicio físico para mantenerse bien y sufren un deterioro mental que muchas veces es consecuencia de la tristeza e impotencia de tener que vivir como no merecen, porque han trabajado para asegurarse una vida que dista mucho de la que habían soñado.


    Susana Espósito - Publicada el Lunes 16/10/23 - 4925 caracteres
    Fuente: Peter Attia, autor del bestseller Outlive: The Science & Art of Longevity