El destino del Centro Cultural Kirchner

En algunos programas de debate político se habló en los últimos días sobre el Centro Cultural Kirchner. Algunos militantes K, como por ejemplo, Diego Brancatelli, manifestó que no estaría bien cambiar el nombre a dicho espacio y además, algunos otros panelistas se preguntaron por qué corrió el rumor de que cerraría.

Hernán Lombardi dijo que no se cerrará, pero durante el período estival no habrá conciertos como suele ocurrir en febrero y marzo, pero sí seguirá abierto al público para recorrer muestras que se presentan allí.

El antiguo Palacio de Correos, refuncionalizado como Centro Cultural ocupa 100.000 metros cuadrados y actualmente hay solo cuatro muestras de fotos. También se pueden visitar las muestras permanentes como por ejemplo la sala que recrea un despacho de Eva Perón.

Desde el Centro Kirchner dicen que se trata de la transición. Que acaba de cerrar la temporada que programó la gestión anterior y todavía no hay definiciones para la que viene.

El CCK dependía, hasta ahora, del Ministerio de Cultura y del de Planificación. Y sus empleados – unas 500 personas– no formaban parte de la planta permanente del Estado sino que estaban contratados. Días antes de irse, como pasó en otras áreas, la ex ministra de Cultura Teresa Parodi prorrogó todos esos contratos por un año. Ayer el personal estaba movilizado ante el rumor de que no se los darían por válidos.

A partir de la asunción del nuevo presidente, Mauricio Macri, será Hernán Lombardi, el titular del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos. El, con la colaboración de Gabriela Ricardes –que viene dirigiendo el Centro Cultural San Martín– decidirán el destino del CCK. Probablemente, Lombardi pondrá sus oficinas en ese edificio y nombrará un director: Gustavo Mozzi, ahora a cargo de La Usina del Arte.

Susana Espósito - Publicada el Jueves 24/12/15 - 1830 caracteres